lunes, 19 de marzo de 2012

María y Sugey, dos ejemplos de mujeres que han roto barreras para echar sus familias hacia adelante


SANTO DOMINGO.-María, una joven de 16 años, se sintió la mujer más feliz del mundo el día en que se enteró que estaba embarazada, pero su alegría se esfumó cuando ese mismo día el hombre que decía amarla la abandonó.
La joven de tez morena no sabía qué iba  hacer. En su mente sólo se preguntaba cómo iba a sacar adelante a esa criatura que latía en sus entrañas, si  ni siquiera había terminado la secundaria y sus padres, como era de esperase, la botaron de la casa.
La joven encontró refugio en el hogar de una amiga. Y desde ese día comenzó a trabajar, lavó ropas, vendió empanadas y limpió casas. Todo para que  a la pequeña Suri no le faltara nada.
Fue muy difícil para María porque en la sociedad dominicana siempre ha sido duramente criticado el hecho de que una mujer sea madre soltera.
“Son muchas las puertas que se me cerraron y los empleos que no me dieron, pero yo además de sacar adelante a mi hija también seguí estudiando”, indicó María.
23 años después
Hoy, 23 años más tarde, esa niña que bruscamente se convirtió en mujer, es una empresaria, tiene un pequeño restaurante y un hogar propio, aunque humilde. Y es que, María como muchas mujeres dominicanas nunca se dio por vencida, no se ha vuelto a casar, pero sacó adelante a su hija,  a quien le faltan dos cuatrimestre para terminar la universidad.

Muere joven tomó pastillas chinas para adelgazar


Katty Sánchez, la joven  a quien le creció el estómago  tras tomarse unas pastillas para adelgazar, murió  de un paro respiratorio,   sin que su clamor por ayuda fuera escuchado por las autoridades de Salud Pública.
Pese a que llevaba dos meses implorando por una ayuda económica a Salud Pública para poder tratar su extraña enfermedad,  las autoridades sólo  se limitaron a nombrar una comi sión, que  no hizo nada.
“La gente de Salud pública vinieron de allantosos en enero, y yo sé que ellos podían hacer algo y no hicieron nada. No cumplieron ni con la ambulancia que le asignaron ni una enfermera que prometieron que me iban a facilitar”, declaró la señora Paulino.
Dijo que la única institución que la ayudó fue Promese, que le proporcionó albuminas y le dio algún dinero para cubrir los costos de algunos procedimientos.
El deceso de la joven se produjo a las 9:00 p.m. del pasado domingo en el hospital Salvador B. Gautier, donde tenía una semana interna, dijo su madre, Ana Paulino. 
Desde hacía tres años Katty estaba postrada en cama debido a un extraño trastorno de salud que le hacía crecer el vientre desde que comenzó a tomar la pastilla china “Reduceweight”  o “Pastillas de uvas verdes” para rebajar de peso. Los médicos no pudieron determinar las causas de sus dolencias.