Santo Domingo.-Un nuevo peligro asecha a los estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Y es que hay delincuentes que venden dentro del recinto golosinas con una sustancia desconocida que provoca que las personas pierdan el conocimiento.
Hace una semana que Karla, una joven estudiante de Medicina, le compró una paleta a un vendedor ambulante cerca de la Facultad de Medicina.
“No pasaron ni dos minutos cuando comencé a sentirme mal, tenía el cuerpo pesado, no podía ni caminar”, dijo la joven de 23 años. Lo siguiente que recuerda es que estaba en la avenida José Contreras y un hombre moreno y delgado la sujetaba fuertemente por un brazo y le decía “ponte esta cremita para que se te pase”.